estas tierras, la espera que la acompaña, saluda a diario y rige miles de reglas, crea convulsiones hasta la nausea, perros hambrientos se tragan la luna cada noche, lloran como siempre lo han hecho, salen, encuentros luminosos se llevan por el mundo la esperanza, vemos con ojos de abuelo resignado todo lo que puede suceder, mientras, niños entumecidos de noticieros esperan parpadear más rápido que nunca para levantar en andas mi tierra, más hermosa que nunca, más conflictuada que nunca, crisis con símbolos de cambios explosivos y gente nueva, sobreviviente siempre, somos, sobrevivientes siempre, abrazarán sus banderas.
Hoy te quiero país de amasijos y otros más lo hacen, algo saldrá de ese sentir.
