etiquetas


Se avecinan tormentas, al parecer siempre se avecinan tormentas en la secuencia de la vida.

Al parecer, si no fuera por los medidos lapsos de plenitud, lo que queda sería un reality divertidísimo de lucha por la sobrevivencia, en el cual el que dura más es tan sólo el más viejo, el que sobresale será el más recordado; el héroe o el el anti-héroe, los invencibles.

Entonces, andamos etiquetados, correteando por las calles con nuestro papelito de color, ahí nos auto-anunciamos cómo empezar nuestros caminos, cómo debemos vivirlos y finalmente cómo sentenciarnos hasta alcanzarlos. Terminamos conviertiéndonos en cualquier lácteo, vitualla o conserva de supermercado, buscando no quedar vencido y evadir cualquier tormenta, cualquier salida por la tangente que podría desestabilizar un ciclo mil veces girado.

2 comentarios:

Vania B. dijo...

A los humanos nos gusta etiquetar, nombrar, clasificar. A mí también me matan las etiquetas, pero siempre terminamos en alguna categoría.

Yo tengo varias, pero en secreto y paralelamente trato de esquivarlas, de no tener fecha de vencimiento ni instrucciones de uso. No siempre lo logro, pero es sano intentarlo.

Un beso, Dani.

pietila dijo...

Cierto Vania, estamos siempre de algún bando o en alguna resolución personal que nos empuja a hacerlo. En fin, la idea es no enceguecerse y ser felices. Un beso y un fuerte abrazo querida Vania!!